«Su objetivo es que el contrato, negocio o declaración esté ajustado a la legalidad y sea inatacable. La escritura pública es fehaciente ante los tribunales de Justicia: nadie pone en duda su veracidad. Tranquilidad: firmar cualquier documento ante Notario aporta la tranquilidad de que el negocio o contrato es definitivo, inamovible y eficaz.»
extracto de www.notariado.org